Korean Sushi

Sinceramente me ha encantado, es un sitio tradicional literalmente, el lugar lo lleva un matrimonio y el sitio es acogedor, es pequeño el local además los platos tradicionales como el kimchi me gustaron porqué me recordaron a lo que tenemos en España los encurtidos pero en una base vegetal, los platos son pequeños pero al tener encuentra quiénes son el personal (el matrimonio) está súper bien.Son unos Cracks. La verdad que los platos en general me gustaron bastante, en lo personal puede que alguien luego no coincida conmigo pero si se nota que es "cocina casera", y la verdad el señor super amable, paciente, buena gente porqué cedió su hora de cierre por los clientes, yo estaba nerviosa la verdad porque en mi mesa éramos varios y estaba recordando a cada rato la hora para irnos jajajaj .Y la mujer una crack en la cocina los platos salían y estaban muy bien elaborados. Les recomiendo ir, es toda una experiencia, sean educados y amables porque es como parte de su cultura y lo van agradecer, aunque no lo digan se nota

Tomamos bibimbap, maki, té de jengibre, mochi y kimchi. Todo está buenísimo y hecho al momento, por lo que no se debe ir con prisas. El local es pequeñito y muy tranquilo, puedes escuchar perfectamente a la otra persona sin que os moleste el ruido o tener que subir la voz. El trato es excelente y muy cercano. Adaptan el picante lo pueden adaptar a tu nivel de tolerancia. 100% recomendado, volveremos sin duda.

Fuimos un grupo de 10 personas y nos lo pasamos genial, todo estaba riquísimo. La comida estaba fresca y hecha al momento, reservamos con antelación y nos recomendaron muy bien que platos típicos coreanos pedir. Abrieron el local un poco antes, dado que es muy pequeñito y pedimos con antelación para que pudiera estar todo preparado al llegar: lo sirvieron todo muy rápido y estaba hecho fresco y muy rico. Tomamos bibimbap, mandu, bulgogi, kor maki, fritto maki, mochi, soju y café. Todo buenísimo, el kimchi delicioso. Tienen una terracita pequeña si prefieres pedir fuera, aunque nosotros comimos dentro. El propietario nos explicó todo muy bien, tuvo mucha paciencia y adaptó el nivel de picante para que los comensales que no podían comer picante no tuvieran problemas de salud. Como el grupo era una clase de coreano, incluso se interesó por lo que habíamos aprendido ya y nos enseñó a decir algo: 많이 많이 맛있다! 감사합니다, 사장님!